Valores, su importancia para lograr la meta

Las metas deben partir de los valores que cada quien tenga para lograrlos. Las personas actúan de acuerdo con sus valores, experiencia y circunstancias; si tienes claros tus valores, podrás tener límites claros y libertades de acuerdo con tu forma de ver la vida.

¿Qué es un valor? Es un principio que permite orientar el comportamiento para lograr lo que se desea. Esto es, para lograr tus metas, debes alinearlas con tus valores; si haces algo que no va con tus valores, no serás íntegro(a). Cuando se aplica el coaching en alguien, se debe ayudar a esa persona a determinar lo que quiere y los valores que lo guían en su comportamiento y, en función de ello, apoyarlo en determinar el plan de acción para lograr las metas individuales. Cuando el coaching se desarrolla para la vida profesional, estas metas deben alinearse a las metas de cada puesto y a su vez con los del área, para luego alinearse con los objetivos, misión y visión de la organización.

Las metas laborales personales deben alinearse con las organizacionales

Por ello, en un proceso de coaching es importante generar un aprendizaje de la forma en que se construye la realidad y en que se desea alcanzar las expectativas para cambiar esa realidad. Es decir, determinar las habilidades a impulsar que vayan de acuerdo con los propios valores, creencias y objetivos.

Quien aplica el coaching debe acompañar a la persona a lograr sus objetivos; debe detectar lo que esa persona no se da cuenta de que no sabe y así ambos irán conociendo los objetivos, valores y creencias que impulsan o restringen la ruta para llegar a las metas deseadas después de ir conociendo aquellas fuerzas impulsoras y restrictivas que generan las creencias y reafirman los valores que determinan la acción diaria y compleja de cada individuo. En este punto, la persona que aplica el coaching debe ubicar y buscar la salida de las creencias autoaprendidas. La persona en quien se aplica el coaching debe ir avanzando en detectar las habilidades, actitudes y todo aquello que ha aprendido, pero aún debe seguir trabajando. Cuando ha trabajado en ello, ambos determinan en qué momento concluye el proceso de coaching.

Es importante considerar que la base del coaching son los valores, objetivos y creencias, si se definen los valores como todo aquello que determina lo que le importa a una persona, lo que dirige su actuar, como el amor, honestidad, tristeza, etcétera. Es significativo reflexionar que todas las personas tienen valores, ya que al final son lo que son por lo que hacen durante las 24 horas de cada día. Es importante mencionar que la persona que aplica el coaching debe poner especial atención en la relación de confianza, respeto y profesionalismo que va a establecer con la otra persona.

Quien aplica el coaching considerará los valores, objetivos, metas y creencias que acompañan a la otra persona; conocer esta información le permitirá desarrollar la mejor estrategia para acompañar eficazmente a esa persona durante el proceso.

Recuerda que tus acciones se determinan por tus valores; por ello, es necesario que hagas una reflexión de los valores que determinan tus actos. Para ello, puedes responder esta pregunta:

¿Cuáles son los valores que influyen en mi comportamiento cotidiano?

Una vez contestada, revisa cuáles son tus cinco prioridades en la vida y si se relacionan con tus valores personales.

En el proceso de coaching, conocer los valores es fundamental para poder realizar avances; además, los valores, objetivos y creencias deben estar claros; si identificas cada uno de ellos, puedes ser congruente contigo mismo(a).